martes, 12 de marzo de 2013

VELADA DE SANTA LUCIA 2013

IMPOREXPORT
CONTEXTO FRONTERIZO COLOMBO-VENEZOLANO

Colectivo:DESDE LA FRONTERA

 
CURADURÍA
 
Florencia Mora
Universidad Javeriana Cali
Grupo De Humanitate
 
Hablemos de botánica, dice Bourriaud:
                      (…) macetas, viveros, invernaderos, pleno campo.
 
Resulta interesante la relación que evoca Borriaud entre la botánica y la práctica del arte, en la actualidad. El modernismo -dice - elogió desde siempre la raíz, fue radical. Los manifiestos artísticos del Siglo XX clamaron por la depuración; se trataba de cortar las ramas inútiles, sustraer, eliminar, reiniciar el mundo a partir de un nuevo lenguaje liberador. Agrega el autor que quizás la modernidad de nuestro siglo, se “reinventa” oponiéndose a los radicalismos. Alude entonces al surgimiento de un arte radicante, en contraposición a un arte radical. Radicante es el arte que se desplaza favoreciendo trayectos, multiplicidades y traducción como modelo ético. Y menciona a Duchamp cuando hacia el final de su vida, decía: “Estaba bastante contento por ser alguien sin raíces. Porque precisamente, temía la influencia de la raíz en mí. Cuando me encontré del otro lado, no había raíz ninguna porque había nacido en Europa. Así que resultaba fácil. Estaba inmerso en un baño agradable porque podía nadar tranquilamente y no se puede nadar tranquilamente cuando hay demasiada raíces, ¿sabe?”.
 
Bourriaud alude al artista de principios del Siglo XXI, un artista que evoca plantas que no remiten a una raíz única para crecer y extenderse, sino que crece hacia múltiples direcciones, como la hiedra, que pertenece a la familia botánica de los radicantes y sus raíces crecen según su avance. El artista radicante se extiende en función del suelo  que lo recibe,  traduce en  el espacio /tiempo en que vive, es un sujeto de negociaciones cuyo pensamiento es nómada, flexible y abierto. En términos estéticos, el artista radicante realiza trayectos, propone errancias y abandona la pretensión de pertenecer a un espacio/tiempo fijo. Los artistas del arte radicante, realizan actos de traducción, hacen que el sentido de un texto se mueva de una forma lingüística a otra, recortan fragmentos de significación y son nómadas recolectores de signos.

Es así que un grupo de artistas, oriundos de la zona fronteriza que comparten Cúcuta, Villa del Rosario (en Colombia), Sáenz Páez, Rolando Cerón Pérez, Rosa Delia Duarte Leal, conforman este entramado creativo que propone un arte radicante, relacional “que pone en marcha las propias raíces en contextos y formatos heterogéneos, traduciendo ideas, intercambiando y trasplantando comportamientos”. Un arte que representa la vida cotidiana, que da cuenta de las tensiones entre la imagen que una época crea y la que proyecta realmente.

Las obras aquí presentadas:  Detonante, Pimpivsa, El Paso, Gafas,  Benezuela, Así hablamos en la frontera mano, Adiós a Zoila, Moda retro, Punto de encuentro, Frontera y Contrabando, desencadenas reacciones, generan debate y movimiento, ponen en escena arraigos, desarraigos, éxodos, paisaje cultural, itinerarios, sobrevivencia, lenguaje y contradicciones.

                               
 
San Antonio del Táchira y Ureña (en Venezuela), partícipes en anteriores versiones de la Velada de Santa Lucía, se reúne para ser parte de la última Velada de Santa Lucía, que se inaugura el 28 de febrero y se extiende hasta el 3 de marzo de 2013, en Maracaibo (Venezuela). Los artistas pretenden mostrar la dinámica cotidiana de la línea fronteriza entre Colombia y Venezuela a través de la adecuación de un lugar en el barrio Santa Lucía, un espacio fachada que permita al espectador sentir que ingresa a un gran camión cargado de los “ires y venires” que puede encontrar en el cruce de la geografía fronteriza. Cada artista exhibe su obra, pero en colectivo, el grupo se transforma en un complejo cargamento de imágenes y textos de entornos fronterizos. Carmen Lizbeth Niño Prado, Diana Marianella Villamizar Albornoz, Eddy Zoraida Contreras Malagón, Gabriel Castillo López, Geovanny Arias Quiroga, Karol Lisseth Gamboa Pallares, María Alexandra Morelli Navia, Néllyda Amparo Cárdenas, Martha Sáenz Páez, Rolando Cerón Pérez, Rosa Delia Duarte Leal, conforman este entramado creativo que propone un arte radicante, relacional “que pone en marcha las propias raíces en contextos y formatos heterogéneos, traduciendo ideas, intercambiando y trasplantando comportamientos”. Un arte que representa la vida cotidiana, que da cuenta de las tensiones entre la imagen que una época crea y la que proyecta realmente. Las obras aquí presentadas: Detonante, Pimpivsa, El Paso, Gafas, Benezuela, Así hablamos en la frontera mano, Adiós a Zoila, Moda retro, Punto de encuentro, Frontera y Contrabando, desencadenas reacciones, generan debate y movimiento, ponen en escena arraigos, desarraigos, éxodos, paisaje cultural, itinerarios, sobrevivencia, lenguaje y contradicciones.
 
1 Entrevista con Jean Antoine, Fin N. 13, p.66 en Bernard Marcadé, “Laisser Pisser le Mérinos. La Paresse de M.D. L
Echoppe, 2006. Citado por Bourriaud, Nicolás. Radicante. Adriana Hidalgo Editores. Buenos Aires. 2009. p.56.
 
2 Bourriaud, Nicolás. Radicante. Adriana Hidalgo Editores. Buenos Aires. 2009.
 
 
 
OBRAS Y ARTISTAS
 
MODA RETRO
Néllyda Amparo Cárdenas Clavijo

La obra consiste en una instalación de rollos de telas sobre armario en madera y textos alusivos a almacenes antiguos de Cúcuta; históricamente se llevaban telas desde Colombia pero con la extrema devaluación del bolívar, moneda venezolana, los almacenes de telas pasan por una gran crisis porque ahora se traen a muy bajos precios desde Venezuela.



PUNTO DE ENCUENTROMartha Sáenz Páez

Se teje una bolsa de mercado de la unión de varias bolsas de víveres en las que hemos llevado de aquí para allá y de allá para acá diferentes productos; en el tejido del telar se lanzan las puntadas de un lado al otro y es así como nos hemos ido entrelazando a lo largo del tiempo borrando la línea imaginaria de la frontera o haciéndola más ancha. Colgamos la mochila de diferentes puntos como los puntos cardinales de las ciudades o poblaciones en las  que hemos entrado en  nuestro diario ir y venir y finalmente, llenamos  la mochila con la
representación de los objetos y con los objetos los sueños que llevamos de aquí para allá y de allá para acá.

 


PIMPIVSA
Diana Marianela Villamizar Albornoz

En Cúcuta existen unos 5.000 vendedores de combustible que la gente los llama pimpineros, que desde hace 40 años  han creado un habito  muy particular en la forma del consumo de la gasolina. Esta realidad cotidiana en la vida de frontera, relacionada al hecho de la comercialización prácticamente “legal” de la gasolina venezolana de contrabando en Colombia, me hace pensar en la condición del ciudadano según el país donde vive y plantear una propuesta artística, que invite espectador a reflexionar sobre la problemática. Por otra parte, siguiendo con mi línea de investigación en relación al arte contextual,  ligado a las cosas que pasan día a día. Y siendo este hecho muy relevante dentro del conjunto de circunstancias que se viven en la frontera colombo-venezolana, presento la propuesta PIMPIVSA, que pretende mostrar al espectador el origen del combustible a través de su marca de fábrica venezolana PDVSA, y crear una relación critica del hecho. Para la ejecución de la obra he decidido relacionar una fotografía en pantalla de luz y  un video.
 
 


 

CONTRABANDO
Rosa Delia Duarte Leal
La artista pretende plantear una reflexión sobre el contrabando de mercancías a lo largo de la frontera colombo venezolana, en especial, el contrabando de carteras. La obra se basa en una instalación de tres carteras colocadas con precio en forma de venta sobre una mesa. Cada cartera a su vez es una pequeña instalación donde se presentan tres temas. Cada instalación se elabora combinando el collage, la pintura, materiales reciclados y algunos objetos resonantes que traen recuerdos de la vida del artista y por medio de los cuales maneja temas como la violencia contra la mujer, el erotismo, fetichismo a las cirugías y otros.






EL PASO
Eddy  Soraida Contreras Malagón

Cruzar la frontera de Colombia a Venezuela es solo cuestión de pasar un puente sea por arriba o por debajo; a lado y lado encontramos dos pequeñas poblaciones que de una u otra manera viven de lo mismo: El contrabando de gasolina, cerveza, alimentos y divisas. Para muchos, ir de La Parada (Colombia) a San Antonio (Venezuela) es parte de su diario vivir, para otros o para el visitante, es todo un acontecimiento. Las largas colas de carros que obligan a pasar en moto taxi siendo ésta una aventura casi que peligrosa, con escenas de maleteros a lado y lado con sus bicicletas cargadas de pimpinas, cajas de cerveza, mayonesa, aceite, leche, azúcar, en fin, cualquier cantidad de productos, además de los pequeños puestos improvisados de cambia bolívares a lado y lado de la carretera, los talleres de reparación de ciclas, las bodegas abastecidas en un lado y en el otrocompletamente vacías. Todo esto, en tan solo unas cuadras que rodean un pequeño puente. Por medio de una serie de fotografías secuenciales quiero plasmar esta travesía teniendo en cuenta los pequeños detalles que hacen fantasioso o mágico El Paso.

 



BENEZUELA
Geovany Arias Quiroga
 

La obra se refiere a una problemática que se vive en la frontera donde los víveres no se consiguen, hay escasez de alimentos, la venta es regulada; mientras que en la frontera colombiana están todos los productos del vecino país y se pueden adquirir sin ningún problema, ESO SÍ A MAYOR COSTO, pero se consiguen. Entonces ese problema del contrabando y corrupción es el diario vivir de las fronteras.



GAFAS
Gabriel Castillo López
 
Se trata de una serie de dibujos con seres fantásticos que exhiben gafas que he ido diseñando, las cuales aparecen expuestas en una instalación junto con los dibujos. El principal fundamento inspirador es reconsiderar este elemento, siempre simétrico, y lograr el diseño de un objeto de carácter geométrico asimétrico y que pueda ser usado, haciendo de este un accesorio con mi propia marca GAB, tal como firmo en mis obras.



ADIÓS A ZOILA
María Alexandra Morelli Navia
 


Muy  pesar de la lucha de tantas mujeres anónimas a través de la historia, quienes han abierto caminos hacia la emancipación, todavía persiste de manera sutil y otras veces directa, el modelo patriarcal que ha imperado en casi todas las culturas.
El rol de la mujer ha estado ha estado ligado a la administración del hogar, al cuidado de los hijos, los oficios caseros. Estas actividades domésticas generalmente pasan inadvertidas aunque son parte del día a día.

Soy-la es un juego de palabras y puede aplicarse a todo; soy la que barre, la que trapea, la que lava, la que plancha; Soy-la de aquí, pero también Soy-la de allá

Zoila trabaja formalmente fuera de casa pero informalmente dentro de ella.

Zoila, nace de una acción cotidiana que se repite una y otra vez.
 
Adios a Zoy-la es una caricatura de la realidad, una sátira partir de objetos cotidianos asociados a esas labores rutinarias  (guantes, escoba, recogedor). Apropiándose del espacio público para hacerlo evidente al espectador.

Busca un lenguaje que genere fácil lectura de comunicación con la concurrencia valiéndose de estereotipos.

Zoila pretende a atreves del humor acercarse a un público desprevenido y lo quiere hacer sin mayores pretensiones.

…Y al final Zoila dice o estará por decir……


 


¡ASÍ HABLAMOS EN LA FRONTERA MANO!

Karol Lisseth Gamboa Pallares
 
Por tradición, la forma de hablar en cada región y territorio es particular. En nuestra zona de frontera, es curioso observar el fenómeno léxico que se ha gestado, producto de ese intercambio cultural. Palabras que viajan y traspasan nuestra zona fronteriza han dado como resultado un sinnúmero de modismos que hacen parte de nuestra idiosincrasia, varían con el pasar del tiempo y son cotidianos en nuestro entorno comunicativo.

Algunas frases de la instalación:

1. ¡Póngase mosca!, ¡coma avispa!, ¡avíspese!, ¡mosquéese!
2. Ese es buquiado
3. Voy a tanquiar


 
 FRONTERA
Rolando Cerón Pérez - ROLXER
 Lámina de zinc encontrada. Elementos que la componen: Trampa para ratones (encontrada) - Cuchara (encontrada) - Puntillas (encontradas) - Cuchillo (encontrado). Elementos en estado de oxidación. La Frontera es un límite político, donde las fuerzas del poder ejercen presión, rigor y control; valiéndose de posturas autoritarias y defensivas. Todos estos elementos nos llevan al concepto claro de una frontera, la Lamina de Zinc; al espacio cartográfico, el Cuchillo; las fuerzas del poder que lo dividen todo, las Puntillas; a los estados guarnecidos, la Trampa de Ratones; a ese pequeño espacio donde se ejerce toda la fuerza del control de los estados en mando, la Cuchara, la Sociedad de esos estados afectados.


 
 
DETONANTE
Carmen Lisbeth Niño Prato
 
La economía ilícita ha sido siempre un detonante para la economía del país, en un tiempo lo practicaban algunas personas pero con el tiempo y debido al desplome del bolívar, se a convertido en todo un negocio de grandes ingresos. Aunque se a aplicado un método para regular el contrabando de gasolina llamado el chip, en la frontera  todo se aprovecha y a pesar de haber implementado ese método pareciere que tampoco  a obtenido resultados. EL Sueldo mínimo es de 2.147 bs mensuales  en Venezuela  con una sola pimpina que descarguen hacen el doble  de lo que un jornalero se  gana en un día, por esa razón muchas fábricas de blue jeans, zapaterías y otras han tenido que cerrar por falta de personal ya que sus trabajadores han decidido,  llevar contrabando y lo ven  como algo fructífero en recursos que se ven aparentemente, pero que a la larga solo es una economía fantasiosa.